La doctora Villegas dirige el centro en el que vive José Mur.
Pero sus métodos para tratar a los pacientes son demasiado clásicos. Sobreprotege a los chicos del centro como a su único hijo, Raúl, al que adora, y mantiene en un mundo lleno de normas y horarios, y que chocará de manera frontal con Carol, la psicopedagoga que trata a José.